lunes, 21 de abril de 2008

Jornadas de creación


Yo no sé, nunca sé. Ellos comentan sobre cantidad de nombres y renombres, personalidades que según la Escuela, se amerita conocer. Lo hacen como en un lenguaje de señas incongruentes y fechas anacrónicas; a veces, me resultan hasta estúpidos e innecesarios. ¿Para qué? No lo sé, supongo que todos quieren brillar.

Mi cuento será sobre un hombre que no puede escribir o una mujer incapaz de concebir, es casi lo mismo...a diferencia que la mujer carente puede adoptar otra existencia, mientras que al hombre (con esto me refiero a hombre/mujer) sólo le queda el suicidio o ponerse a escuchar tango.

Bien, en realidad no sé a donde quiero llegar, supongo que quería probar la eficacia del teclado o ¿la de mis manos?

Mañana pisaré mejor...

2 comentarios:

... dijo...

Cuando vuelvo del club, a eso de las 22, paso frente a un local dedicado a articulos tangueros. Siempre está cerrado a esa hora, pero el dueño deja un televisor en la vidriera, y en e pueden verse parejas de todo el mundo, en distintos certámenes, y desde unos parlantes invisibles se escuchan esas melodías tristes, que nunca puedo evitar. Siempre me quedo escuchando un rato. "Una luna envuelta en nubes, envuelta en humo, envuelta en tango"...

... dijo...

Qué bueno está concebir, carajo.