lunes, 1 de diciembre de 2008

Las ratas son inmortales



Todas las ratas son inmortales


El pozo perece ante su aliento tierno;

se abren, se ocultan,

son eternas y frágiles, son feroces

Y bellas, son garras que zurcen

la pintura centenaria de la humedad,

son como dientes que saben siempre

lo que deben morder,

como ojos que nunca pierden su presa,

son todos los seres que me pisan.


Yo fui ellas con la piel y el grito,

Él fue ellas con la noche mala

Y el calor maldito.

Porque siempre están ahí haciendo ruido,

Rodando comidas pasadas,

Vigilando las respiraciones de los moribundos,

Cortando los polvos milenarios que caen,

Él fue ellas siempre, con el sudor ácido en la frente,

Con la vista cándida y falaz.

Yo fui ellas siempre, con el alma roída,

Con el gemido silencioso, con el placer fingido.

Y ahí están ellas como antaño, viéndonos, viéndose,

Llorando por el alimento que ya no sabe,

Riendo de las arcaicas trampas que ya no sirven.

2 comentarios:

... dijo...

Excelente, Amu. Me encantó. Extrañaba tanto leerte...

Este era tu proyecto de novela, no?

Lo continuarás o queda como está?

Realmente muy bueno. Espero hablarte pronto. Hasta entonces.

Emily Rangel dijo...

No lo sé, esto es viejo. Pero supongo que debo seguir con eso si no quiero morir XD. Te extraño. Quiero leerte pronto.